Publicidad

martes, octubre 08, 2013

CONTAR LA HISTORIA

Fueron los griegos los primeros en conocer el valor de contar el pasado, de contar la historia, no para no repetir los errores que cometimos, como siempre se dice, sino para que quedara constancia de lo que había sucedido, para contar los hechos que para ellos no eran tan lejanos. Esos hechos, una vez registrados, una vez conocidos, difundidos y guardados, forman la realidad, forman la verdad, la certeza.

Esa realidad de lo sucedido es más importante que no repetir los errores. Crear la narración de unos hechos, de un lugar o una nación contribuye a crear una conciencia de existencia, si hay historia es que existimos. Si hay historia es que lo que yo hago no es vivir una vida, sino vivir una vida en un contexto, vivir para que sea contada, para que forme parte de una narración más completa.

Los romanos, herederos culturales de los griegos, descubrieron la grandeza de era narración del pasado. Podían contar la historia y podían contarla desde su punto de vista. Es decir, descubrieron que lo contado quedaría como la realidad y que así podrían formar una identidad y una realidad distinta a la de los hechos.

En resumen, descubrieron que podían modificar la realidad. Lo sucedido y lo contado no tenía por qué encajar. Cambiar la historia es cambiar la realidad. Cambiar los hechos pasados sirve para cambiar los hechos futuros, porque en ellos se asienta la realidad, se asientan las leyes, los territorios, las conciencias, los contextos, los idiomas.

Si cambiamos la historia, cambiamos el presente, porque la historia es el relato de lo que nos ha traído hasta aquí. Forma la realidad actual, porque la historia no está desconectada de la realidad, la realidad está hecha de la historia.

Cambiando la historia, cambiando el relato del pasado, lo que cambiamos es el presente, igual que si cambiamos nuestra propia historia, si contamos lo pasado con mentiras, con medias verdades, con ocultaciones, cambiaremos lo que somos. Pasaremos de buenos a malos. De héroes a villanos. Si cambiamos la historia, todo puede cambiar.  



No hay comentarios: