Si hay un guionista de la realidad, hay
que reconocer que es bueno y muy divertido. Hace mejores chistes que
los humoristas profesionales. Si luego no ocurrieran cosas serias con
estas cosas, si no hubiera muertes o violencia y terror, esta sería
la noticia más divertida del año, pero no es así.
Un individuo esperaba a su ex a la
puerta de su casa. Le había sido infiel y quería pedirle perdón
por ello. Para ello confeccionó una pancarta en la que decía muchas
cosas bonitas. Pero el ser humano siempre miente. Y todas las cosas
que decía aquella pancarta eran mentira. Ella se quedó tomando unas
copas, llegó seis horas después que él y eso le enfado. Su
demostración de amor acabó en una amenaza de muerte.
La realidad nos da ejemplos
continuamente. Ejemplos de estupidez. Ejemplos de ironía. Ejemplos
de humor. Ejemplos de terror. Pero parece que no aprendemos nunca.
Esperemos que alguien si lo haga, porque si no, pasarán más de mil
años muchos más y seguiremos siendo los mismos imbéciles que
somos.
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