El pasado se empeña a veces en volver.
No en forma de la misma situación repetida. El mismo pasado. Te veo
por casualidad un día. Y al día siguiente vuelves a estar ahí. Te
dije que solía ir por allí. Sólo palabras vacías. Pero poco a
poco quieres más. De mí. Pero no sé qué quiero darte. Sigues
siendo la misma. Inteligente y manipuladora. Apuesto a que sí. A que
tengo razón. A que vuelves a ser infeliz. A que buscas otra vez
diversión. O calma. Pero no quiero darte ninguna de las dos cosas.
Ahora no. Otra vez no. Pero no te vayas demasiado lejos.
1 comentario:
vueltas en círculos, eterno retorno y en mi caso decadencia... suena bonito, espero que la llama vuelva a encenderse.
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