Es TT en twitter. #ligademierda. Porque la gente está harta. Harta de pagar sin sentido. De que los horarios no te respeten. De que los equipos jueguen con tu amor y con tu ilusión y te suban el precio de la entrada (vale mucho ir a los campos, entre 40 y 70 euros por entradas que no están entre las mejores) y de que te suban el precio de los abonos y de que se creen nuevos canales y tengas que cambiarte de plataforma pese a las promesas que te hicieron. Todo ¿para qué? Para ver una liga sin competición, una liga que se acaba en el minuto 40 de cada partido como mucho, una liga donde sólo dos equipos se lo reparten todo, una liga donde el resto de equipos, por cobardía, por estupidez, por conveniencias no declaradas, por amiguismo bailan el agua a esos dos y se conforman con las migajas que sueltan. O casi todos.
Mientras, los espectadores, a los que se nos reclama ir al campo, consumir periódicos, tertulias radiofónicas, canales de televisión, partidos aburridos, amar a un equipo que no nos genera ilusión, no tenemos derecho a nada que no sea pagar. Poner la cartera. Y esperar a que pase algo que no pasa.
Una liga poco competitiva. Una copa hurtada, seccionada y aburrida. Una supercopa que no sirve de nada. Nadie parece interesarse por nada que no sea llenarse los bolsillos. Presidentes de clubes que son ya meros cambistas de jugadores que dejan un beneficio mínimo en sus bolsillos, agentes de jugadores que no hacen otra cosa que enmarañarlo todo y encarecer los productos y subir las pretensiones y engañar a todos, sobre todo a los espectadores, presidentes mafiosos de televisiones que imponen su criterio a equipos estúpidos que vendieron hasta su alma por un dinero malgastado, dirigentes institucionales incapaces, políticos ocupados en otras cosas seguramente más importantes. Nadie hace nada. Y el espectador se cansa y se aburre. Y cuando pierdan al espectador todo caerá, porque ellos no juegan por dinero, sino porque les miramos y si dejamos de hacerlo, dejará de importar y todo el emporio económico que han montado caerá.
Cada cual deberá tomar su decisión. Aunque está cada vez más clara.
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