Entre el teatro de finales del siglo XX destaca una obra que no se movía en los estándares que tenían las demás. En esa época destaca el teatro que se centraba en la realidad, que ponía ante los ojos de los espectadores lo que se veía en la calle, con crudeza y con el humor propio de la realidad.
A mediados de los 80 se estrenaban obras como Bajarse al moro o La estanquera de Vallecas, que además de tener cierta retranca del siglo de oro en sus títulos, reflejaban la cambiante situación de la sociedad española del momento. Y ambas, además fueron llevadas con gran éxito al cine.
Pero en esa misma época había quien todavía volvía los ojos al pasado, al tiempo anterior en el que la Guerra Civil y la dictadura lo marcaron todo. Ay, Carmela escrita por José Sanchís Sinisterra cuenta una historia que se desarrolla durante la guerra.
Una pareja de cómicos recorre el frente para divertir a los soldados y ganarse la vida como mejor pueden y saben, haciendo reír y haciendo olvidar a los soldados la situación. Pero además de su trabajo hay que tener en cuenta sus ideas políticas, sus sentimientos y su pasado.
Con ese trasfondo de teatro dentro del teatro, de actores que actúan de actores y con el contexto de la Guerra Civil, el autor compone una tragicomedia en la que el espectador se ve inmerso en un tobogán de subidas y bajadas, de sufrimiento y risa.
Ahora se repone la obra en el teatro Galileo de Madrid, aunque confiamos en que como muchas otras obras, pueda girar y pasear su espectáculo por muchas otras capitales españolas. Y además de eso, la reponen con un gran elenco y a un buen precio. Dos datos que siempre hay que tener en cuenta a la hora de elegir un evento cultural.
A mediados de los 80 se estrenaban obras como Bajarse al moro o La estanquera de Vallecas, que además de tener cierta retranca del siglo de oro en sus títulos, reflejaban la cambiante situación de la sociedad española del momento. Y ambas, además fueron llevadas con gran éxito al cine.
Pero en esa misma época había quien todavía volvía los ojos al pasado, al tiempo anterior en el que la Guerra Civil y la dictadura lo marcaron todo. Ay, Carmela escrita por José Sanchís Sinisterra cuenta una historia que se desarrolla durante la guerra.
Una pareja de cómicos recorre el frente para divertir a los soldados y ganarse la vida como mejor pueden y saben, haciendo reír y haciendo olvidar a los soldados la situación. Pero además de su trabajo hay que tener en cuenta sus ideas políticas, sus sentimientos y su pasado.
Con ese trasfondo de teatro dentro del teatro, de actores que actúan de actores y con el contexto de la Guerra Civil, el autor compone una tragicomedia en la que el espectador se ve inmerso en un tobogán de subidas y bajadas, de sufrimiento y risa.
Ahora se repone la obra en el teatro Galileo de Madrid, aunque confiamos en que como muchas otras obras, pueda girar y pasear su espectáculo por muchas otras capitales españolas. Y además de eso, la reponen con un gran elenco y a un buen precio. Dos datos que siempre hay que tener en cuenta a la hora de elegir un evento cultural.
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