Es lo que pasa con las cosas. Las que funcionan y lo hacen bien se vuelven famosas. Tanto que se vuelven imposibles. Aunque tal vez son cosas que se podrían hacer mejor. Como tantos otros llevo todo el día intentado acceder a la página de Hacienda para no tener que molestarme más tarde, pagar un gestor, o todas esas cosas que habría que hacer.
No espero que me devuelvan dinero. A mí me gusta pagar a Hacienda. Porque así pagamos médicos, profesores, hospitales, carreteras. De hecho cuanto más paguemos mejor serán esas y más rápido y mejor el servicio que prestan. Esa sería una gran solución. Pero es tan parecida al comunismo que asusta.
Después de este panegírico habría que decir que todo esto sería más fácil si pudieran dar más capacidad a una página web tan usada. No sabemos cómo funciona la cosa. Ni si se podría hacer, pero si se puede, hagánlo, que el mensaje de inténtelo en 24 horas ya fastidia un poco.
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