No es fácil de explicar. Es sólo unas ganas enormes de no hacer nada. De no decir nada. Es un inmenso deseo de estar quieto y callado. De estar en reposo. Sin nada en qué pensar. Sin pensar en ti. Después de mucho tiempo sin pensar en ti. De no verte. De no ir a verte. Cansancio. A veces no es más que eso. No es que deje de quererte. No es que no quiera nada de ti. Es sólo que me canso. Y no tengo ganas de nada. Supongo que tiene que ver con esto. Con la realidad. Con lo que pasó y pasa. Pero no te preocupes. No pasa nada. Sólo me canso un rato. Luego, ya me ves, vuelvo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario