AUTÉNTICO

Últimamente me tropiezo mucho con la palabra auténtico o su variante femenina. Se dice mucho de la gente que es un poco tonta o está loca de remate. Es un tío muy auténtico, lleva sin lavarse desde 1984. Así la gente auténtica es la que hace un poco lo que le sale del pie y como son auténticos o son así te lo tienes que comer. Es una tía muy auténtica por eso no se depila el bigote. Es una auténtica lesbiana, lleva camisas de franela. Y así.

Luego están las otras cosas auténticas. Auténtica madera dicen cuando hablan del contrachapado o de los adornos no plásticos de un coche de lujo. Es decir, que como eres pobre no tendrás madera en el coche, cosa que sentirás mucho, porque como todos sabemos nada es más útil en un coche que la madera. Por eso yo siempre llevo un tablón en el maletero. Nunca se sabe cuando fallará el motor. Auténtico zumo de fruta para las chucherías. Auténtico pollo para el avecrem, auténtico aceite de oliva para el pan de molde. Te hace reflexionar sobre la falsedad ¿Con qué se hacen las cosas que no se hacen con cosas auténticas? ¿Con aceite de marmota, pollos de goma y zumo en polvo de ese de los hoteles?

Me preocupa la autenticidad de las cosas. No sólo la de los diamantes, que ya se saben que son el mejor regalo para una chica, sino también la del mundo en general, ¿quién nos dice que lo que vemos por la tele no es todo falso y no lo auténtico? ¿qué pasará el día que se presente un telediario diciendo: Ahora con auténticas noticias? Supongo que en mucho canales dimitiría todo el mundo.