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lunes, enero 31, 2011

HUMOR

Hay veces que me gustaría ser humorista, pero no puedo, porque no tengo gracia y porque la gente piensa que hablo en serio cuando estoy hablando en broma. Eso da lugar a muchos malentendidos. Piensan que soy racista, xenófobo y machista, porque piensan que mis ironías son ciertas. Pero no, yo sólo odio a los franceses.
La cuestión es que hay por ahí quien dice que se podría hacer un monólogo sobre Ofiuco y el nuevo zodiaco. Que el material ya está ahí, que sólo hay que cogerlo, ni escribir ni nada, que eso es humor en sí mismo. Pero creo que ese material está tan manido que no saldrían más que tópicos.
Sin embargo a veces sí que dan ganas de escribir un monólogo sobre temas que de verdad importan, como la gente que sin motivo alguno te agrega al facebook. Hola, soy la mujer de tu amigo. Hola, nos vimos dos días seguidos en un bar del pueblo de al lado. No, tío, no quiero ser tu amigo en facebook. No quiero que comentes mis fotos. Ni que sepas qué hago ni con quién. Déjame ser un friki en paz. Que a mí me guste beber sangre de cabra no quiere decir que me puedas criticar a tu antojo. Ya veis como no tengo gracia.



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