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sábado, enero 26, 2013

TRES CASUALIDADES QUE LLEVAN A HACER UN POST SOBRE FLEETWOOD MAC

Son casualidades, pero así funciona el mundo, como una casualidad. Cuando vi a Saray Abellán en la voz, recordé que lleva esa nombre por culpa de una canción. Su padre, José Antonio Abellán, siempre decía cuando ponía la canción en su programa de radio (y muchas veces supongo que lo haría como una dedicatoria a su hija, tal vez animándola para un examen, o porque estaba mala en la cama) que su hija se llama así por culpa de los Fleetwood Mac, por su canción Sara.

Un par de semanas después, con Sara sonando a todas horas en mi lista de reproducción, de una manera casi compulsiva como me pasa con otras canciones, descubrí un artículo en El País sobre el grupo. En 1977 estaban grabando un disco y las parejas que lo formaban se habían separado. El batería,  Mick Fleetwood, que también había sido abandonado por su mujer en la misma época, asistía atónito a las canciones que se disparaban unos a los otros. Stevie Nicks (de la que hablaré otro día, lo prometo) le lanzaba Dreams (tal vez la canción más conocida del grupo) a su ya ex pareja, Buckingham, guitarrista del grupo, que contestaba con otra canción tal vez igual de famosa, con el descriptivo título Go your own way. El disco se llamó Rumours, porque ante la situación interna todo el mundo decía que se separarían, todo eran rumores y rumores. No se separaron. Vendieron 30 millones de copias de aquel disco.

La semana pasada, viendo Cómo conocía vuestra madre, Ted fantasea sobre su futuro y se ve en ese futuro presentando a sus amigos a una novia que se llama Rhiannon, y aclara, como la canción de Stevie Nicks. Es una canción del grupo, del disco anterior a Rumours.

Tres casualidades que han conducido hasta este post, y a que suene continuamente Fleetwood Mac en mis altavoces y en mi cabeza. A ver si se me pasa pronto. Aunque mientras lo estoy disfrutando.

(Sara, del disco Tusk
Dreams, del disco Rumours
Go your own way, del disco Rumours
Rhiannon, del disco Fleetwood Mac
El artículo del País es “contigo iba ser diferente” de Iñigo López Palacios)




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