O "Quantum of solace", para los puristas, es el título (como bien ya sabréis) de la nueva película de nuestro agente británico favorito, 007. Continuación directa de "Casino Royale", nos trae a un Bond bastante cabreado con el mundo que está dispuesto a solucionar todos sus males de amores a base de repartir hostias como panes y desnucar al primero que se cruza en su camino.
Y ahora al turrón: ¿Es buena la peli? Pues… No está mal, la verdad. Entretiene y se pasa bien, con momentos de acción muy logrados. Ahora bien, ¿Es una peli clásica de James Bond? Ni de coña. Todos los patrones y esquemas que se repiten hasta la saciedad en cada una de sus pelis aquí no salen. No hay gadgets mega sofisticados, ni comentarios socarrones, ni un “Me llamo Bond, James Bond”. Por no haber, ¡No hay ni polvo con la protagonista!
Pero al igual que estos elementos han desaparecido, otros se mantienen y mejoran: las persecuciones son la leche y las peleas, pues la verdad no me imagino a Brosnan encajando y repartiendo como lo hace Craig. Y es que aquí la elección del rubiales, creo que ha sido todo un acierto para la revitalización de la saga. Ha insuflado un golpe de aire fresco que realmente hacía falta. No tiene el sarcasmo de sus predecesores, pero su chulería es máxima y sabe como terminar una conversación, como cuando al final dice a M: “Yo nunca me he ido”.
Además, la franquicia, reconozcámoslo, necesitaba renovarse. Quizás dentro de 10 años los films de Bond vuelven a ser como los protagonizados por Roger Moore (para mi el mejor James), pero los nuevos “episodios” tienen buena pinta y, sobre todo, están cosechando un gran éxito de público, que es lo que queremos todos a los que nos gustan las películas de 007.
Así que nada, pasad por el cine y ya me diréis, pero no creo que salgáis descontentos. Puede que el malo de turno, el Sr. Green, no esté a la altura, (que no lo está y es un pringaillo muy patético), pero Bond, cada vez que mira a cámara después de repartir unas cuantas hostias, ¡Hace que nos acordemos que estamos en una película del mejor agente al servicio de su majestad!
Y ahora al turrón: ¿Es buena la peli? Pues… No está mal, la verdad. Entretiene y se pasa bien, con momentos de acción muy logrados. Ahora bien, ¿Es una peli clásica de James Bond? Ni de coña. Todos los patrones y esquemas que se repiten hasta la saciedad en cada una de sus pelis aquí no salen. No hay gadgets mega sofisticados, ni comentarios socarrones, ni un “Me llamo Bond, James Bond”. Por no haber, ¡No hay ni polvo con la protagonista!
Pero al igual que estos elementos han desaparecido, otros se mantienen y mejoran: las persecuciones son la leche y las peleas, pues la verdad no me imagino a Brosnan encajando y repartiendo como lo hace Craig. Y es que aquí la elección del rubiales, creo que ha sido todo un acierto para la revitalización de la saga. Ha insuflado un golpe de aire fresco que realmente hacía falta. No tiene el sarcasmo de sus predecesores, pero su chulería es máxima y sabe como terminar una conversación, como cuando al final dice a M: “Yo nunca me he ido”.
Además, la franquicia, reconozcámoslo, necesitaba renovarse. Quizás dentro de 10 años los films de Bond vuelven a ser como los protagonizados por Roger Moore (para mi el mejor James), pero los nuevos “episodios” tienen buena pinta y, sobre todo, están cosechando un gran éxito de público, que es lo que queremos todos a los que nos gustan las películas de 007.
Así que nada, pasad por el cine y ya me diréis, pero no creo que salgáis descontentos. Puede que el malo de turno, el Sr. Green, no esté a la altura, (que no lo está y es un pringaillo muy patético), pero Bond, cada vez que mira a cámara después de repartir unas cuantas hostias, ¡Hace que nos acordemos que estamos en una película del mejor agente al servicio de su majestad!
"¡Cuanto más enamorado estoy, más reparto!"
1 comentario:
Creo que hacía falta renovarse y con este Bond, se ha conseguido.
Ha pasado de ser más ejecutor como en realidad corresponde a un doble 0 y ha dejado más de lado al seductor facilón.
Y si, a mi me ha gustado mucho la peli.
:p
En fin, por qué será?
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