Comenzaré por Morena, a la que ya conocéis algunos (los que hayáis leído el post de la "fiesta italiana/española"). Es de Verona, tiene 22 años y un nivel muy bueno de inglés (aparte habla algo de chino). Está estudiando para ser traductora e intérprete y es una chica muy maja. Fue la primera a la que conocí nada más llegar y creo poder decir que me llevo con ella bastante bien. Además, sabiendo que yo estaba aquí solo, se preocupó de presentarme a sus amigos, y desde entonces, siempre que queda con ellos me mete un toque por si me quiero acercar. Y esto, se agradece, porque la verdad, no tenía ninguna necesidad de hacerlo. Aquí ya se lo tiene más o menos montado y con su gente viviendo a no más de 15 metros de nuestro apartamento. Pero aun así se molestó en integrarme en su pandilla y siempre se lo agradeceré ¡Tante grazie, Morena! Por cierto, para los que van de sibaritas y creen que al pedir Lambrusco, están pidiendo lo más de lo más: A los italianos les parece una mierda, y lo que suelen beber es Prosecco, otro vino espumoso, pero no Lambrusco (lo que no quita para que nos guste, pero me entendéis por donde voy, ¿No?)
Tomándonos una cervecita.
Y luego está Ju-Hi (esta es mi interpretación de como suena su nombre). Es de Corea del Sur y llegó el pasado domingo. Tiene 25 años y es la primera vez que sale de su país. Su inglés no es malo, pero todavía tiene muy marcado el ritmo y el acento de las leguas de esa zona de Asia. Como todo buen oriental, es muy educado y pide permiso para todo. Nada más llegar, le ofrecí una birra y se quedó un tanto flipado, preguntado "For me?". A modo de compensación sacó un paquete de algas fritas con aceite de sésamo y las echo en un plato, a modo de aperitivo (están cojonudas, por cierto). Nos las bebimos hablando y contándonos la vida, se fue a su habitación y me trajo un regalo: ¡Unos calcetines para darme suerte! Me quedé tan a cuadros que todavía no le he preguntado si es habitual entre sud-coreanos el regalarse calcetines. Cuando me entere os lo cuento, pero imagino que sí, porque a María y Morena también se los ha regalado.
Los mencionados "socks" ¡Qué frikada!
Primer brindis de este hombre ¡Wi-Ha-Yo (por nosotros)!
Brindando con Cramberry Juice.
4 comentarios:
Las uñas las tienes de lo más decente ,por lo menos limpias,pero los dedos los tienes hechos polvo, nó parecen las manos de un profesor en vez de un curso de perfeccionamiento de Inglés parece que estás haciendo uno de Albañilería.
Cuidado con el Coreano,haber si os deja Chin-lú y Chin-ná,aunque tiene cara de buena persona y tu camiseta rosa CHACHI.
Si, la verdad que vaya manos que tengo. Y las palmas... ¿parece que estuviera todo el día con una pala en lugar de con la tiza!
Estas muy bueno ¿Sales con alguien o estás disponible?
Besos anonimos (por el momento).
mammamia,qué mosqueada me ha dejado la foto en la que estais Chin-lú y tú brindando con esa pose que tiene ¿ nó será el anónimo este que te está tirando los tejos?
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