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jueves, julio 03, 2008

LA REALIDAD COMO MATERIA NOVELABLE


Se pueden hacer dos cosas: usar la vida como materia novelable o ver como el arte modela la vida.
La gran capacidad narrativa, dramática, poética, humorística y demás de la vida es indudable. Sólo hay que sentarse un rato a escuchar a alguien: nos hará narraciones, descripciones, utilizará el estilo indirecto para contarnos diálogos...
Y no sólo en la forma, la vida misma tiene un componente artístico (desde ahora diremos solamente literario) innegable. Observar la vida es descubrir un poco la novela que guardan las personas que conocemos. Y que muchas veces ellas mismas cuentan. Además tiene ese componente espectacular que tanto gusta en determinado tipo de novela donde de repente y tras páginas y páginas de aburridas descripciones se van juntando los hechos, las acciones trascendentales.
Fijaos bien como esto es así. Y quien dice novela dice poesía, dice teatro, dice humor, dice sátira, dice farsa, dice esperpento. La vida es magnífica y ridícula por partes iguales.
De esto ya se dieron cuenta los escritores realistas y naturalistas del XIX. Balzac, Zola, Galdós, Clarín,... Ellos cuentan la vida que vieron, apenas la retocan, la transforman. Ven en la realidad el arte más cierto y claro y de ella tratan de extraer lo más destacado, la más cierto que será finalmente lo más artístico. Por eso hoy recomendamos esta literatura realista del XIX, de estos o de otros muchos más autores, porque nos ayudarán a desentrañar la vida, que por si no lo sabéis, es esto que vivimos.
Y mañana le damos la vuelta a esto.


Benito Pérez Galdós visto por Sorolla.

5 comentarios:

mammamia dijo...

Me gustaría que algún día se pudiera hacer este experimento:
Reunir a un grupo de personas , que leyeran todas el mismo libro y que se pudieran ir mostrando las imágenes que cada uno tiene de lo que va leyendo ¿coincidirian todas?

Unknown dijo...

pues no, porque incluso la interpretación de algunas canciones son totalmente diferentes entre personas, es más, a veces interpretas de formas diferentes un mismo hecho según el estado en el que te encuentre

mammamia dijo...

querida Cristina, una cosa es el ánimo,el sentimiento y otra el poder de la imaginación,que es por lo que me gusta tanto la lectura,¿coincidiria nuestra imaginación con la del autor, a la hora de describirnos un personaje?

Unknown dijo...

Insisto en que nuestra imaginación también esta condicionada por nuestro estado anímico. Y la imagen que nos hagamos de una lectura, de una historia variara completamente entre personas y entre momentos de la vida.

Que como ya dijo Heráclito de Éfeso (si no recuerdo mal), no es posible bañarse dos veces en el mismo rio.

mammamia dijo...

Cristina ,el susodicho ése, debía ser de secano y nó debia conocer el Rio Ganges,donde todos los años miles de personas se sumergen en él, para iniciar un ritual.