Viendo películas de las que no suelo ver, películas de terror o de miedo, he ido coleccionando, como todos, un montón de personajes que entran en ese tópico llamado psicópata, que no es más que un tipo que mata a gente por el simple placer de matarla.
Con Dexter, ese gran hombre, aprendimos cómo piensa en verdad un psicópata y hasta hemos empatizado con él, nos ha caído bien y deseamos que siga matando. Claro que él mata sólo a los malos, a los que merecen morir, o a los que él cree que merecen morir.
Pero la lista de psicópatas es grande como el cine, y va desde los grandes y bien hechos, como Norman Bates, hasta los pesadísimos como Jason, Leatherface o el de Halloween. Todos son ya tipejos que matan por matar y que además se regodean en un barroquismo inútil de matar de una manera más rara.
Parece que hubieran hecho apuestas entre ellos: ¿qué te juegas que puedo matar a media docena de adolescentes buenorras sólo con una cuchilla de afeitar de tres hojas? Y se pone a ello y el tío lo consigue.
Ahora ha llegado el psicópata moderno, el último de todos, el más pesado y odiado: el rey de Burger King. Supongo que todos habéis visto a este tipejo con máscara siempre riente y vestido de rey de la baraja (con lo que parece un poco sota, para qué negarlo).
Este individuo aparece en su último anuncio torturando a un joven al que ha tirado a un pozo, le ha cubierto de monedas cual tío Gilito y además le ha dado un whopper. Yo no sé cuál es la peor tortura, pero el chaval del pozo grita pidiendo auxilio que es un primor, mientras el psicópata baila como un imbécil de alegría fuera del pozo.
Espero ya la película en la que todos los clientes de un burger sean atacados y masacrados por este monstruo de la pantalla que nos propone morir lentamente comiendo hamburguesas, o rápidamente por sus manos. Nosotros elegimos qué es lo que preferimos.
Con Dexter, ese gran hombre, aprendimos cómo piensa en verdad un psicópata y hasta hemos empatizado con él, nos ha caído bien y deseamos que siga matando. Claro que él mata sólo a los malos, a los que merecen morir, o a los que él cree que merecen morir.
Pero la lista de psicópatas es grande como el cine, y va desde los grandes y bien hechos, como Norman Bates, hasta los pesadísimos como Jason, Leatherface o el de Halloween. Todos son ya tipejos que matan por matar y que además se regodean en un barroquismo inútil de matar de una manera más rara.
Parece que hubieran hecho apuestas entre ellos: ¿qué te juegas que puedo matar a media docena de adolescentes buenorras sólo con una cuchilla de afeitar de tres hojas? Y se pone a ello y el tío lo consigue.
Ahora ha llegado el psicópata moderno, el último de todos, el más pesado y odiado: el rey de Burger King. Supongo que todos habéis visto a este tipejo con máscara siempre riente y vestido de rey de la baraja (con lo que parece un poco sota, para qué negarlo).
Este individuo aparece en su último anuncio torturando a un joven al que ha tirado a un pozo, le ha cubierto de monedas cual tío Gilito y además le ha dado un whopper. Yo no sé cuál es la peor tortura, pero el chaval del pozo grita pidiendo auxilio que es un primor, mientras el psicópata baila como un imbécil de alegría fuera del pozo.
Espero ya la película en la que todos los clientes de un burger sean atacados y masacrados por este monstruo de la pantalla que nos propone morir lentamente comiendo hamburguesas, o rápidamente por sus manos. Nosotros elegimos qué es lo que preferimos.
¿Y este? ¿Qué será será?
2 comentarios:
En dos palabras: "Me parto"!! hay toda una manada de asesinos que disfrutan matando cerebros, presentadores/as de televisión, políticos, constructores...no sé qué es peor....
un abrazo
Buena idea!
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