Para los que, como yo, no trabajamos o lo hacemos poco, el verano no es símbolo de nada. Y menos un día como hoy 30 de junio. Sin embargo, para los trabajadores, o en este caso, para la terapeuta, es un gran día, porque se toma las vacaciones de verano.
Es una época llena de mosquitos, terrazas, calor, piscina, bañadores, bikinis, crema bronceadora, y viajes, muchos viajes. Kilómetros y kilómetros separan nuestra ciudad de los sitios que quiere visitar, que son, básicamente todos.
Para decidir donde va a ir se ha comprado un mapa mundi y unos dardos. Lo colocará en la pared y tirará un dardo. Ahí irá. Si no le convence también se ha comprado uno de España y hará lo mismo. Dependerá también del presupuesto. Total, que se ha ganado un descanso y se lo va a tomar, y no como yo, que no podré descansar. Más que nada porque no estoy cansado.
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