Publicidad

miércoles, abril 08, 2015

VALLE-INCLÁN EN EL ESPEJO DEFORMANTE


Las biografías de muchas personas están tergiversadas por sus propias palabras, escondiendo sus hechos, transformándolos, ocultando sus errores, magnificando sus aciertos. Eso se hace a veces de manera inconsciente, porque los hechos se perciben como vergonzosos, como necesarios de ocultación, porque no es necesario saber o contar. Otras veces se hace de manera consciente, creando un personaje diferente, un personaje que sirva a los fines para los que se creó.

En la última biografía de Valle-Inclán se da esa teoría sobre la vida del autor gallego. En La Espada y La Palabra. Vida de Valle-Inclán, Manuel Alberca nos habla de un hombre que creó un personaje, de un hombre que se ponía en el foco, que exponía lo que quería y ocultaba muchas otras cosas, que ha pasado a la posteridad como uno siendo otro.

No es sólo arrojar luz sobre la vida de un hombre y un nombre mítico en la literatura española, sino sobre todo desmontar el proceso que le llevó a crear ese personaje de sí mismo. La pérdida de su brazo en una trifulca durante una tertulia es ofrecida como hecho desencadenante. A partir de ahí su vida sufre una transformación planeada por él mismo.

De Vallé-Inclán conocemos muchos hechos comunes, muchos tópicos levantados por él mismo. Como otros autores de una época histórica convulsa, Valle sufrió cambios, variaciones, mudanza de opiniones. O es pensamos. Porque puede ser que sólo fuera todo un cuento contado por el autor.

Alberca dice que siempre fue conservador, que nunca fue comunista, que alabó a Mussolini, que planeó y trabajó una red de amistades y de influencias que le ayudó a subir y que además le consiguió algún trabajo. Una imagen que contrasta con la que él mismo publicitó de sí.

Una imagen que se vuelve cómica y tópica y castiza, una imagen distorsionada de un hombre que fue distinto a todo lo que hemos leído o sabido de él, un hombre que se escondió detrás de los espejos deformantes que él mismo nos ofreció. Una imagen que ahora se puede redescubrir.